Ante la consulta popular sobre las prospecciones de Repsol

19 feb 14. Ante el referendum o consulta popular emprendido por CC y PSOE para saber la opinión de los canarios a las prospecciones de Repsol habría que preguntarse qué luz divina habrá iluminado a Paulino y José Miguel para, de repente, volverse tan demócratas y favorables a consultar a la población sobre asuntos de gran interés.

Para tener bien claro ante qué personajes y qué tipo de partidos estamos dando, basta con ojear su pasado por si algún resquicio inspira confianza. A poco que hurguemos descubrimos que estos mismos partidos y estos personajes han amordazado y frenado Iniciativas Populares legítimamente permitidas, como su rechazo en el parlamento canario a la mayor Iniciativa Legislativa Popular, con 56.000 firmas, para proteger las costas de Granadilla del megapuerto de Plasencia y Cía., o el catálogo de especies protegidas redactado en su justa medida para solventar problemas legales que frenaban la intención de destruir los mayores sebadales de toda Canarias que la naturaleza parió justo donde los yonkis del cemento quieren construir el megapuerto de Granadilla para negociete de unos pocos y aposento del Africom para expoliar el continente africano.

Si ya comprobamos el repelús de estos personajes a iniciativas y consultas que nacen del pueblo que les mantiene, habrá que preguntarse por qué ahora CC y PSOE se visten el disfraz de auténticos demócratas si en otras ocasiones han taponado y despreciado cualquier intento por admitir consultas populares recogidas en miles de firmas. La respuesta la encontramos como siempre en los votos, esa costumbre de meter una papeleta en una urna cada cuatro años que tiene tanto poder. No hay otro motivo tanto en CC como en José M. Pérez porque hay que recordar que ambos se mostraron hace unos pocos años favorables a la extracción de petróleo a pocos kilómetros de nuestras costas.

Tanto Paulino como Pérez andan de capa caída en las encuestas de intención de voto. Para captar simpatías y votantes han echado el ojo al papafrita de Artur Mas y su matraquilla de consulta independentista como arma de presión que les otorgue privilegios del estado a modo de euros bien fresquitos. Decimos matraquilla porque tanto Mas como Paulino y José Miguel saben muy bien que el patético gobierno de Rajoy usará su mayoría absoluta para impedir consultas populares, sobre todo por si le cogemos el gusto a la democracia participativa y consultiva y descubren que posiblemente las derechas no ganaran ni una.

Votaré, si tengo la ocasión, aunque sirva de poco, por el NO a las prospecciones como testimonio de mi rechazo, pero mi voto tiene memoria para no caer nunca más en urna para estos partidos que ya olvidaron otro referendum donde Canarias dijo NO A LA OTAN y ya ven, USAID, AFRICOM y Fuerteventura militarizada. Mi temor es el voto sin memoria, que por simpatizar y apoyar esta consulta puede caer en un futuro en las urnas de estos personajes.