Los Cabildos, unos dinosaurios que desangran a Canarias

El ministro de Industria, Miguel Sebastián, con el presidente del Cabildo, J. Miguel Pérez y Demetrio Suárez, -como iba a faltar este personajillo-, en la presa de Chira, ¿Cuando ha visto alguien a un ministro en las cumbres canarias hablando con los pastores, a ver como remediar su precaria situación?

1 abr 11. El los últimos meses, el sindicato de agricultores COAG ha venido denunciando la carestía y la falta de agua en la agricultura de Canaria; entre ellas, se ha denunciado la caída de la actividad agraria en La Aldea de S. Nicolás en un 50%. Ahora están quedando al descubierto las causas de semejante atropello, -todo tiene una explicación-, los dinosaurios del Cabildo grancanarista, han trincado el agua de las presas para justificar la construcción de otro de sus proyectos faraónicos inútiles, “una central hidroeléctrica”, cuyas turbinas serán movidas por las meadas de los conejos, por lo tanto el Sr. Pérez deberá prohibirle la caza a su consejero de agricultura. Ahora de repente tenemos en Canarias “la presa de las tres gargantas”, de las tres tragaderas en que se han convertido el Gobierno de Canarias, los Cabildos y los Ayuntamientos.

Desde uno de estos tinglados coloniales, nos dicen "que van a defender la agricultura a capa y espada", ¡vaya caradura Srs.! ¿Ahora, a dos meses de las elecciones locales y autonómicas? ¡Qué "listos" son estos señoritos del P$o€! ¿Y estas décadas atrás qué han hecho? Contar cuentos, hacer promesas cada cuatro años -que nunca han cumplido-, y colocar alcahuetes para impedirle a los agricultores que se organicen y puedan exigir que se pongan los medios para poder cultivar la tierra y subsistir de sus cosechas.

Claro que el Cabildo grancanarista ha hecho; SÍ, han hecho unos chiqueros para poner cochinos pata negra en Los Corralillos (Ingenio), para hacer asaderos de cuando en cuando. Los Cabildos han destruido centenares de hectáreas de terreno de cultivo, después de ser labrado a pico y pala por nuestros ancestros y lo han cubierto de asfalto y cemento. Le han hecho la vida imposible a miles de agricultores, razón por la cual hoy están apillados en las ciudades costeras como piojos, unos por arriba de otros disputándose un saco de cemento.

Entiendo que la mentira es gratuita y más cuando se tiene a todos los medios de comunicación masivos a su favor, para que nadie pueda hacer propuestas alternativas, -estaría bueno que ahora me fueran a cuestionar mis chanchullos-, pues aquí lo que cuenta es el mercado con productos marroquíes, que es donde ustedes tienen su patria. Ustedes le han venido poniéndole trabas burocráticas y plantándole de pinos las tierras del pastoreo a los agricultores desde hace CUARENTA AÑOS, como para ahora, cuando ya lo tienen todo arrasado destinar recursos económicos al sector agrario.

Las últimas perlas, le llaman “Directivas”

1-. Una profesión milenaria como es el pastoreo, donde siempre los pastores han sacrificado su ganado sobrante, sus corderos para vender o para su consumo familiar; ¡pues no!, está estrictamente prohibido, -porque como te coja el SEPRONA te parte por medio-, ahora hay que mandar los corderos en un vehículo especial al matadero, para que se los mamen los de los cabildos.

2-. Que se muere una cabra, pues está totalmente prohibido enterrarla en el campo, ahora hay que contratar una funeraria, (vehiculo especial) para llevarla al crematorio. Y si no, ¿de qué van a mamar todos los lajas que hay por ahí viviendo del cuento? Esta es la ayuda, el incentivo que los capullos del P$o€ le ofrecen a los pequeños agricultores.

El Campesino.