5 feb 11. Jaime Rubio Rosales
Mi tocayo, Jaime Peñafiel, ha denunciado en su último libro, “El Rey no abdica”, los entresijos de una conspiración que se ha puesto en marcha en España para forzar la abdicación de nuestro Rey, D. Juan Carlos-I, a favor de su hijo Felipe. Estamos hablando, pues, de la Operación Hijo. Sin embargo, aunque el pistoletazo de salida para esta conspiración se dio el pasado domingo, con motivo del 25 aniversario de la jura de la Constitución por el Príncipe Felipe, los hilos de esta puntada vienen de mucho mas lejos. Tendríamos que remontarnos al 23 F, cuando los golpistas contaban con que D. Juan Carlos apoyaría su golpe por haber sido educado para ello por Franco. Pero no fue así, y nuestro Rey les “traicionó” apoyando claramente a la joven democracia española. A partir de ahí los nostálgicos del franquismo le declararon la guerra a Juanito, una guerra que se recrudecería ante la evidente antipatía del Rey hacia el líder popular J.Mª. Aznar, lo que contrastaba con el buen feeling que tenía con Felipe González y ahora con Zapatero. Todos estos precedentes no han hecho sino reforzar los sentimientos antijuancarlistas de la ultraderecha, que se va a emplear a fondo, en los próximos meses para hacer su campaña de acoso y derribo del Rey. Para ello cuentan con medios poderosos, prensa escrita, emisoras de televisión, escritores afines,etc...
La primera de esas balas sin pólvora que han lanzado ha sido la publicación del libro, “Bastardos y Borbones”, que José Mª. Zavala ha publicado en Plaza y Janés. En esta obra el autor sacar a la luz toda la basura de los Borbones hasta Alfonso-XIII.
Sin embargo, enmedio de toda esta metralla Zavala aporta un dato que me parece muy interesante y digno de un comentario. Se trata del descubrimiento de una gran conspiración borbónica que se remontaría a principios del S.XIX. El caso es que el 20 de enero de 1819 muere Carlos IV y le sucede su hijo, Fernando-VII. Pero, ¿era realmente Fernando-IV un auténtico Borbón? Tal vez no, porque Zavala aporta un documento en el que la esposa de Carlos-IV afirma que ninguno de sus hijos son de su marido, sino que los tuvo fuera del matrimonio, con un amante, seguramente el valido Godoy. Para probar esta increíble afirmación Zavala aporta una carta del confesor de la reina Mª Luisa, fechada el 8 de enero de 1819, y celosamente guardada en los archivos secretos de los diferentes gobiernos de España, aunque ahora convenientemente desclasificada, en la que el P. Almaraz dice que:
“Ninguno, ninguno de sus hijos e hijas, era del legítimo matrimonio, lo que declaraba in articulo mortis para descanso de alma y que el Señor la perdonase”
La cosa es que Fernando-IV conocía las declaraciones de su madre a su confesor y, muerta ya la Reina, lo mandó encerrar de por vida en una prisión de Madrid hasta su muerte, lo que nos recuerda la trama del Conde de Montecristo, de Dumas.
Poco antes de morir el P. Almaraz entregó su carta-cerrada- a su confesor hasta que con el paso del tiempo esta llegó a manos de los servicios secretos españoles y celosamente guardad hasta ahora en el Ministerio de Justicia.
Suponiendo que esto sea verdad, y parece que lo es, estamos ante una auténtica carga de profundidad a la monarquía española actual ya que los auténticos Borbones serían los bastardos, de los cuales hay unos cuantos vivos por ahí, y no los que están sentados en el trono.
0 Comentarios Blogger:
Si tiene cuenta de Google o correo de Gmail inicie primero sesión AQUÍ y luego vuelva al blog y elija en el desplegable bajo este texto en "Comentar como" la opción "Cuenta de Google".
Si no tiene cuenta en Google o Gmail hágala con unos sencillos pasos aquí
Puede comentar con su perfil de Facebook utilizando la caja de comentarios que tiene encima de este texto.
Agradecemos su tiempo y dedicación a leer el blog y a participar y comentarnos sus inquietudes.
Los comentarios y opiniones son responsabilidad del autor de los mismos. Seamos respetuosos y hagamos debate constructivo.
Lea nuestras Condiciones de uso